domingo, 27 de noviembre de 2011

Seguido sinsentido.

Dos y siete hacen el día, uno y uno el mes,
el cinco marca hora, tres y cuatro no lo sé.
El sueño llega tarde, la culpa del café,
y de pensarte...
se me cae el alma a los pies.

Espera, voy a encenderme un cigarro. Sigo. Se adivinaba una canción, pero he decidido pasarme a la prosa. Mientras escribía se han hecho las seis, es una hora confusa, porque nunca sabes si llamarla de la madrugada o de la mañana. Hoy todo punto es seguido. No quiero hacer a partes. Nunca me ha gustado hacer nada por partes, pero muchas veces no te queda otra. Reflexiones e insomnio van muchas veces de la mano. El sentido en cambio suele brillar por su ausencia. Brillar por ausencia, nunca he entendido esta expresión. Será que a veces nos excedemos en los recursos líricos o literarios. De lírico y de literario tiene poco el sueño que tuve anoche, o incluso el sueño que estoy teniendo ahora mismo mientras escribo. Sin embargo contemplando tu cuerpo como poesía y las maneras de tus formas, literatura de atención... es otro cantar. Otro cantar es una expresión que entiendo más. Volviendo a tus formas... me he distraído pensándolas. Sigo distraído. No, no es masturbación, es platónico. Geometría perfecta, es la que forman tus curvas con tus líneas. Problema geométrico, acariciarlas correctamente. Gran parte de culpa de este insomnio es tuya. Miento. No es insomnio. Es 'desvelación'. No me gusta el termino desvelar. Por esta regla de tres la vida sería un sueño constante, con 'desvelaciones' puntuales cada día. Espera he cambiado de opinión, si que me gusta desvelarme. Aunque me gusta más desvelarme contigo a un lado. Me preocupa que toda reflexión acabe en ti. No te lo mereces. No has hecho nada para merecerlo, y mucho por desmerecerlo. Hay sentimientos absurdos e incoherentes, que te llevan a la estupidez y absorción más absolutas. No es una definición de amor. No creo que el amor sea definible. Al menos entre dos variables. Que fea queda la palabra definible. Pero lo he comprobado, está bien escrita. Llevo casi 238428349234 segundos escribiendo sinsentidos. Es mentira son cuarenta y dos minutos. Voy a probar a cerrar los ojos con fuerza, a ver si el sueño se da por aludido. Últimamente no me hace mucho caso. Le debe estar molestado la 'rachita' de salir de fiesta que llevo desde años atrás. Iba a escribir sobre salir de fiesta, pero me he arrepentido. No quiero que se me haga la hora de comer sin haber dormido la siesta del borrego. Algún día buscaré de donde viene esa expresión del borrego. Mi siesta del borrego hoy va a ser especial, va a empezar a las siete de la mañana, y con suerte terminara a las tres del medio día. Buenas noches, buenos días, buenas tardes. Date por aludido según a la hora que me leas, según a la hora que me duerma, según a la hora que despierte o según a la hora que me vuelva a desvelar. Voy a levantar la persiana. Me enciendo el último cigarro. Voy a mirar por la ventana a terminar de reflexionar en silencio y sin escrito, con un poco de suerte antes de que salga el sol estaré dormido.


Vicente Viz.

1 comentario:

  1. Al menos te desvelas con algo que mirar.
    Me ha gustado mucho!
    Un abrazo :)

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